martes, 3 de marzo de 2009

Somos un mojon - Cronica del viernes 27 de Febrero de 2009

Maravilloso dia, habia cogido el jueves y viernes de vacaciones para pasarlos con las niñas porque ellas no tenian cole, el jueves nos fuimos a la exposicion de los cadaveres plastificados, una pasada, vaya curro y vaya lección de anatomia para profanos más impresionante. Pero llego el viernes, tras hacer el entreno correspondiente se me ocurre dar un paseo con mis hijas y mi sobrino en la bici, a la chica la llevo yo en el transporting porque todavia no quiere ir sola sin ruedines. La mañana iba de maravilla, tranquila, monotona, incluso aburrida y mira por donde, al coger un baden de los maravillos pasos de cebra, mi niña se pilla el pie entre el chasis y los radios de la rueda trasera y se arma el follon. MEGA esguince y mega quemadura, dejo las bicis tiradas y un angel en forma de mujer se aparece y nos lleva al ambulatorio de Mairena, que rato, la niña echa polvo y sin dejar de llorar, yo jurando en arameo contra mi mismo y constatando lo gilipollas que soy por mucho que quiera disimularlo, supongo que lo de no tener hermanos pequeños no me ha curtido en estas lides y lo de ver a tu hija en este estado es de lo peor que nos puede pasar. Que dia más malo, de estar feliz, esperando al sabado para ir a Almonte a competir, de estar a gustito sin currar, en definitiva, de pasar la vida sin problemas a darte cuenta lo poca cosa que somos y con lo poco que se nos arruina la vida, esa que creemos que tenemos controlada los que estamos todo el dia controlando el tiempo para poder currar, entrenar, cumplir con la familia, comer, dormir y no quedar mal con nadie para hacer unas pruebas en condiciones. Asi que llevo unos dias con el alma por el suelo pensando en lo poquito que nos mantiene arriba y lo pronto que todo se puede joder no más se tuerza algo de tu alrededor. Que dificil es esta vida nuestra, porque lo de entrenar sin animo es de nota, tras fallar el sabado, el domingo me quedaba hacer un olimpico casero, y aunque me costo, tras curar a la cria, sobre las 12:30 me fui a la piscina y sobre las 15:30 termine la prueba, con mis transicciones aun más gazapianas si cabe pero por lo menos contento de haber tenido fuerza mental y fisica para acabarla. El camino hacia Lanzarote es un misterio como la vida misma.

2 comentarios:

Ahastari dijo...

Bueno Rafa, lo primero es que espero que este mejor la pequeña, imagino el susto y sobre todo el cuerpo que se te queda viendo a la niña con el dolor y sin poder hacer nada. Creo que tienes razón en lo que dices sobre la vida, en lo incontrolada que puede ser, sobre todo para aquellos que intentamos llevarla algo más controlada. Me alegro de que entrenaras el domingo y que te despejaras un poco. Sabes, no sé muy bien porqué pero estoy seguro que en Lanzarote te irá muy bien, ya me contarás pero creo que has llegado a un nivel de entrega personal alto, muy alto, y que eso esta por encima de cualquier entrenamiento posible. Espero que se mejore tu hija y que sigas entrenando, currando, trabajando por el club y haciendo todo ese monton de cosas que te hacen disfrutar, por al fin y al cabo eso es lo importante. Que pase lo que pase, y venga lo que venga, estemos seguros de haber disfrutado, eso no te lo quitará nadie, y la sonrisa de llegar a casa después de una paliza entrenando y ver a las niñas no puede pagarse. Un saludo y sigue con tu camino, que no es una línea recta, eso es seguro, pero tienes muy buenas herramientas para orientarte.

Gazapo dijo...

Oju, Alberto, que bonito. Gracias, de verdad, pena de nuestro salto generativo, sino te ibas a enterar de las porritas y de las porritas bebiendo cerveza, aunque a lo mejor de esto ultimo te gano.