CRONICA DEL IRONCAT 2008 o como disfrutar de un IRONMAN

Lo primero es lo primero. GRACIAS a todos, en primer lugar a mi mujer porque el finde ha sido titánico, completito (bueno no todo lo completo que me gustaría para hacer honor a mi nombre, jejeje), en segundo, a Esther y Miguel, por facilitar el hacer la prueba y hacerla mucho más agradable y familiar, con lo poco que nos vemos parece que somos amigos de toda la vida y eso yo lo agradezco mucho, y en tercer lugar, a TODOS los que antes, durante y después llamaron, escribieron e incluso pensaron en mi durante un segundo, porque seguro que eso me dio fuerzas para terminar mi segundo IM con una prestancia que no creí que fuese yo el que estaba en mi pellejo.
Empezamos:
El jueves parto a las 14:15 de Sevilla rumbo a tierras Tarraconenses, ni paramos a comer ni a prácticamente nada, llegamos en 7:15, new record, eso si sin niñas. Cenita romántica y yata.
El viernes, día de asueto y visita a Peñiscola, la verdad es que un sitio muy guapo aunque dentro de un par de meses no creo que se pueda parar por allí, a las 17:00 charla orientativa de la prueba y recogida de dorsales, esto ya ha empezado. Por la noche cenita macarronifera y pal sobre a las 23:00.
Tras dormirme no se ha que hora a las 5:05, hora muy premiada, levantada y para la salida. Nos relajamos en exceso y llegamos a las 6:15 a la salida, mientras aparcamos nos dan las 6:30 y el maño entra en un bar con las feminas y va y ¡pide un café y una tostada!, me ataco, lo mando al carajo y le digo que yo me voy para el boxes que todavía hay que preparar un montón de cosas, antes me libero de carga extra porque la barrita que me comí me sento muy bien para limpiar el intestino. Total, que prácticamente no me da tiempo ni para llegar a la salida, nos saludamos, nos hacemos un par de fotos y empieza la prueba. Al principio nada de cómodo, estaba flotando pero en la prueba no en el agua, poco a poco entro en donde estoy y la segunda vuelta ya si estoy en ella, ya soy consciente que estoy otra vez aquí, como el año pasado, que tengo que aguantar y que tengo que disfrutar para pasar lo mejor posible los 226 km. Termino la natación muy cómodo, disfrutando e incluso con ganas de hacer algún metro más, si, ya se que suena a vacilada pero es que en ese momento me estaba encontrando realmente bien. Transicción tipo Gazapo, es decir, me seco, me pongo la equipación de ciclismo completa y empiezo a dar pedales, hasta ahora todo muy bien, el día empezó muy tranquilo e incluso la temperatura me pareció de lujo. (6 vueltas de 30 km.)
Las dos primeras vueltas de bici ni me creía los parciales, 1:01 y 1:02, a este ritmo bajo de las 12 horas, ole, mis cojones, pero en la tercera vuelta, además de que Miguel me da alcance, la verdad es que tiene merito este maño porque si lo hubieseis visto hace dos años en Guadalajara me daríais la razón, el tiempo cambia, empieza a llover, cosa que al principio me jode pero que no me importa porque mi velocímetro no cambia, sigo a 30-31 km y dando pedales pero de repente empiezo a atrancarme y a darme cuenta que otro amigo se junta a la fiesta, mi compañero de fatigas, el Eolo, que se podria haber quedado en la cama pero que decidió sumarse a la fiesta para amargársela a más de uno, bueno pues el marcador ya no sube de 25-26 cuando voy en contra del viento y, que le vamos a hacer, a seguir pedaleando, no queda otra. En la tercera vuelta, Inma me da el chubasquero indiscreto, que os lo cuente Miguel que a mi me da risa, y me quedo sin camiseta porque el maillot estaba chorreando. Sigo dando vueltas aunque ya la media se me escapa pero no los ánimos. La penúltima vuelta deja de llover pero no se lleva a Eolo y en la última vuelve el agüita para que no eche de menos no haberme quitado el chubasquero. Y bueno en 6:45 ya estoy al borde de la maratón (6 vueltas de 7 km), otra transición marca de la casa y ya estoy con mi mono de Camaleón, este año no se me olvido, mis medias largas y mi gorra de Andalucía para que vean estos catalinos que por abajo también existen gente con cojones de terminar un IM (aunque sea un poco entrar en su juego político pero me sale así del corazón); las dos primeras vueltas las hago a muy buen ritmo, incluso me freno, no quiero ir a menos de 5:30 porque el año pasado el mazo apareció muy pronto, la tercera vuelta sigo controlando el tiempo y mis piernas, mi compañero Miguel me deja pasar y no me da la oportunidad ni de subirlo un poco porque se para y no corremos ni 1 metro juntos, pena y dolor por no poder echarle una mano pero es verdad que esta carrera es individual y que hay que sufrirla uno solo; ya metidos en la cuarta ya empiezo a no poder llevar el ritmo que quiero, las patas ya se van acartonando y la rodilla derecha me va anunciando que toca empezar a sufrir. Y eso hago, sufrir la segunda 1/2 maratón con toda la dignidad que me queda, eso si, sin poder subir al ritmo que me gustaría pero sabiendo y disfrutando que estoy aquí, que cada vez quedan menos pasitos y que cada vez que mi mujer me da un animo de aliento cuando corre a mi vera, me gustaría darle un besazo y decirle cuanto la quiero pero no tengo cojones de pararme no vaya a ser que no pueda seguir con la carrera. Ya estoy en la quinta vuelta, me encuentra a Robert Mayoral debido a mi mega-mono y me da recuerdos para Michi, le devuelvo el saludo y al final de meta nos despedimos, esta claro que parece buen tío y que es un maquina porque lo acabo sobre 10:30 y sin machacarse en exceso, que bárbaro. Bueno, sigo a la mió, casi entero, me dan la gomilla blanca y enfilo la meta, esto esta hecho y este año no he perdido el norte en ningún momento, estoy hecho un maquina, sinceramente, lo de vivir un IM y estar en el es un gozo (aunque algunos pensaran que estoy loco), difícil de explicar. Total, 12:45, encantado de llegar y de ver la meta en condiciones, no como el año pasado, jejeje. El nivel de la prueba subió este año mucho, es decir, de 120 a 215 participantes. Hubo comida para dar y regalar, los avituallamientos super completos, barritas, coca-cola, agua, aquarius, botes de bici, platanos, naranjas. Es evidente que el circuito no es el más atractivo del mundo pero si que es seguro y difícil de meter la pata aunque también hubo algún que otro accidente.

GRACIAS otra vez a TODOS porque no digo que sin vosotros no lo hubiese hecho pero si os digo que con vuestro apoyo es mucho más fácil. Mi sueño se ha vuelto a cumplir y esta vez me ha dado cuenta de que los sueños, si los perseguimos sin duda y sin respiro, se cumplen. Buscar los vuestros porque si yo lo he conseguido todos podemos lograrlo, os lo aseguro. El año que viene Dios dirá lo que me espera pero va a ser difícil superar tanto goce. Ah y animo a los Lanzaroteños que este año la isla se va a volver amarilla-verde de tanto Camaleón que va a recorrerla.